Seguimos Siendo Pobres

En una oportunidad leyendo un libro de Peter Druker encontré una afirmación acerca de que hacer negocios no se trata de comprar barato y vender caro,  si no de agregar valor y generar riqueza, lo cual no excluye que la perspectiva social ocupe un lugar por encima de los esquemas económicos, sin embargo se debe estar atentos a los acontecimientos que parecieran trastocar esta afirmación, en especial en este caso, el tema de los combustibles que comenzamos viendolo localmente y ahora lo hemos visto interesante para cualquier frontera a nivel mundial.
Así, encontramos publicada en el diario El Nacional del 10 de febrero 2012, la información según la cual Venezuela contrarresta el debilitamiento de la demanda interna en el mercado estadounidense de combustibles con un aumento de las importaciones de gasolina, aunque no se dice cuanto se importa, este diario afirma que según el informe de la Opep de febrero 2012 la importación aumentó 44,1% en 2011 con respecto a 2010. Al día siguiente el mismo diario publicó que PDVSA presenta un deficit de gasolina de 40mil  barriles diarios y que posiblemente este siendo cubierto con las importaciones señaladas. Independientemente del origen de la gasolina comercializada en el país, permitir que el contrabando siga su actividad en la frontera es una contradicción, mas aún cuando se esta advirtiendo que se compra a precios internacionales y se vende subsidiado en el mercado local, el cual esta siendo asaltado con libertad por parte de los contrabandistas a pesar de los esfuerzos de las autoridades fronterizas.
En este orden de ideas, se tiene del otro lado de la frontera que las autoridades colombianas (ministro de minas y alcaldía de Valledupar) se reunieron desde el 9 de febrero 2012 para  revisar las posiblidades de reducir el precio de la gasolina y controlar el contrabando. Estas propuestas tratadas en esta reunión tenian la intensión de acabar con la huelga que arranco a principio de mes y creo problemas en la localidad ya que se quedaron sin gasolina legal los carros del aseo, las ambulancias, bomberos, policia y la propia alcaldia, es decir, mantuvo a Valledupar al borde de una emergencia sanitaria y a punto de afectar la normalidad del Magdalena donde también se tiene comercio ilegal de combustibles; este paro además logro animar a mas estaciones de servicio a paralizar sus actividades, se sumaron más de cien E/S entre San Alberto y El Copey en el Cesar y finalmente termino el viernes 17 de febrero con un acuerdo entre los involucrados.

A partir de la madrugada del sábado 18 de febrero, las E/S volvieron a abrir sus puertas para proveer gasolina por la vía legal, si embargo los pimpineros también abrieron sus negocios ilegales, sobre todo en La Paz, a 15 minutos de Valledupar y donde según el alcalde, Wilson Rincón, 15.000 de los 24.000 habitantes de su municipio viven directamente del negocio ilegal, mientras el resto mejora su economía gracias a la plata que mueven los pimpineros, "unos 33.000 millones de pesos al mes, por la comercialización de 10 millones de galones", el grueso de las ventas se hace en las casas de 22 de los 23 barrios de La Paz.
Jorge Quintero, enviado especial del diario el Tiempo comenta que según una fuente de inteligencia, "Un carrotanque con 3.500 galones de gasolina cuesta en Venezuela 700.000 pesos, a precio de venta al público, y en La Paz se pone a 14 millones de pesos, 19 veces más".

Intentar el mejoramiento del mercado de los combustibles legales en el Cesar pasa entonces por reducir los impuestos para que disminuya el precio de la gasolina y el contrabando sea menos atractivo para así poder iniciar un proceso de reconversión de los pimpineros en otro oficio, pero esto no parece tarea fácil, ya que las autoridades no saben qué hacer.
Agrega Quintero que la última vez que la Policía intentó cerrar las ventas ilegales, en agosto del 2008, murieron dos pimpineros: uno en un retén y otro en una revuelta; en respuesta, los habitantes usaron la gasolina ilegal para quemar la alcaldía, el banco y la estación de policía. Más de tres años después de este enfrentamiento, el pueblo sigue viviendo de la gasolina de contrabando.
Estas narraciones al mejor estilo del oeste, dejan oír veces como la de Juan Wild, representante de los pimpineros, quien afirma que ellos no son los únicos ilegales, dice que las E/S le hacen trampa al sistema,  argumenta que: "Nosotros vendemos gasolina de contrabando hace 20 años y las estaciones reportan una baja en sus ventas de un 90% en el 2011, como si el fenómeno fuera nuevo", según él, las estaciones de Valledupar nunca han vendido la gasolina, por la que no pagan Iva ni impuesto global, sino que la revenden en Barranquilla, donde esta es más cara y paga más sobretasa (25%) frente a 12% fijado para la capital del Cesar, con lo que se quedan con la diferencia. Agrego, al crearse el puesto de control en Copey, les impidió a las E/S sacar el combustible para revenderlo en la capital del Atlántico, por lo que las estaciones dejaron de comprar cerca de dos millones de galones. "Los pimpineros dicen que las estaciones dejaron de comprar gasolina porque ya no podían hacer trampa, y las estaciones dicen que fue por el contrabando. Yo creo que se dieron los dos fenómenos; el primero ya lo controlamos", dijo Julio César Vera, jefe de Hidrocarburos del Minminas.

Aspecto de la Reunión. Cortesia @areacucuta

Ya casi como si de un segundo capitulo se tratara, había de incluirse a Cúcuta, capital del departamento Norte de Santander y en donde también se genero información durante la reunión de funcionarios colombianos y venezolanos  en febrero, a la que asistió el Alcalde Donamaris y propuso a los ministros de defensa de Colombia Y Venezuela la instalación de 20 estaciones de servicio de PDVSA, administradas por pimpineros de Cúcuta, según el alcalde esto podría beneficiar a la población mientras se controla el contrabando, lo que no se dijo fue ¿Cómo se paga la construcción de las 20 estaciones de servicio?, ¿Qué precio tendría este combustible? ¿El entrenamiento de los pimpineros incluirá la parte ética que los orientará a ellos y a sus jefes y a los jefes de los jefes para cumplir con el cometido propuesto por el Sr. alcalde de la ciudad? ¿Pagaría impuestos este combustible? ¿Y por qué no lo hace Ecopetrol? ¿Será que este mercado fronterizo no le intereza?, o ¿Será que es preferible que otro asuma la perdida? ¿Quien le sacaría el cuerpo a un buen negocio? – Parece de entrada un hueso difícil de roer, ¿Quién se atreverá a hacerlo y asumir los resultados de este tremendo negocio? – Valla papa caliente que puso en la mesa el Sr. alcalde..!
Y para completar la semana antes de los carnavales, el Sr. Otto Lenin Parada, funcionario de Pdvsa Gas Comunal Táchira, es citado por el diario El Tiempo de Bogota a propósito de un ofrecimiento que habría hecho de proponer a la directiva de Pdvsa para vender gas de manera legal a Cúcuta, ya que allá tienen problemas por falta de este recurso. Mientras el Sr. Parada piensa  que "El gas a los colombianos les saldría más económico y nosotros tendríamos mayores y mejores ingresos con la comercialización, además que se evita el peligro que representa la manipulación de manera irregular", todo el gas de Ureña y San Antonio se lo llevan a Cucuta y sus alrededores por el alto precio que tiene allá. La solución inmediata mientras deciden que hacer con el ofrecimiento hecho, es controlar de manera efectiva el producto, ya que mientras exista el comercio de productos baratos desde Venezuela a Colombia, la corrupción acaba con cualquier control que se pretenda utilizar. Las autoridades de ambos lados son los beneficiados, como dicen en mi pueblo, tienen sus bolsillos como cachete de musico.
Mientras todo esto sucedía, Dos módulos portátiles para la venta de combustible fueron colocados en el municipio Gran Sabana de Bolívar, en función de atender la demanda de gasolina de las y los miles de turistas que visitarán las bellezas naturales de esta tierra durante los carnavales. Que siga la rumba, seguimos siendo pobres...!