Expropiación venezolana a estaciones de combustible afecta a transportadores

Caracol, (2010, junio 01) Expropiación venezolana a estaciones de combustible afecta a transportadores. Regional. http://www.caracol.com.co/nota.aspx?id=1306424

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El servicio que prestan los transportadores de la frontera entre Colombia y Venezuela se paralizaría en más del 50 por ciento por cuenta de las expropiaciones que realizó el gobierno venezolano a las estaciones de servicio ubicadas en San Antonio, Ureña y San Cristóbal, en el Estado Táchira.

Según Celestino Moreno, representante de este gremio en esa zona del vecino país, la nueva administración no permite que los vehículos puedan abastecerse con la misma cantidad de combustible de antes, provocando una baja significativa en las rutas que diariamente se despachan entre Colombia y Venezuela.“Nosotros tenemos vehículos de hace más de 20 años en servicio, lo cuales tienen un motor de alto cilindraje y con estas medidas restrictivas de no poder tanquear lo suficiente no se pueden hacer los mismos recorridos”, señaló el dirigente gremial.El problema afecta a cerca de 950 transportadores, quienes anuncian una reunión urgente con las autoridades para buscar soluciones.

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Estas primeras reacciones eran de esperarse, es posible que se incrementen, ¿a quien le va gustar que le quiten una regalia como la gasolina Venezolana?, de las mejores del mundo y practicamente regalada.
El punto más importante en todo este asunto es que estos "transportadores", usan sus "vehículos (...) los cuales tienen un motor de alto cilindraje", para llevar la gasolina y venderla en Cúcuta, por la sencilla razón de que allá una pimpina cuesta entre 15 y 20 mil pesos y hasta más dependiendo de la dificultad para traspasar la frontera, y en Venezuela esa misma pimpina (22 litros) sólo cuesta Bs. 1,76.
La cuenta es sencilla: el promedio del precio de la gasolina venezolana es Bs. 0,080 el litro y una pimpina se llena con Bsf. 0,080 * 22 = Bsf. 1,76, y es vendida en un margen que puede oscilar entre 15 a 25 mil pesos dependiendo de la dificultad que represente cruzar la frontera, con el cambio Bs./$ en 0,27, y una pimpina en 18 mil pesos, eso significa: 18000/0,27 = Bs. 66,66, lo que representa más de 37 veces la diferencia de precio de la pimpina. En un ambiente de estos por supuesto que todos quisieran tener un motor de alta cilindrada para llegar primero a Cúcuta, vender la gasolina y regresar a comprar más...
La renta petrolera definitivamente es un gran negocio para estos 950 transportadores, a expensas del tesoro nacional, por tal razón el proyecto de control de suministro de gasolina en la frontera con Colombia es un aporte que esta a disposición de la nación para minimizar el contrabando de extracción y en consecuencia minimizar la corrupción que crece a la sombra de éste.
Por otra parte, de acuerdo con las declaraciones del ministro de Energía y petróleo y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez al diario Últimas Noticias en fecha 27 de mayo 2010, la violación de los cupos establecidos para la venta de combustible, la especulación en el precio de venta del carburante de 1,50 sobre el 1,20 establecido, y el incumplimiento de los turnos de funcionamiento en estas bombas, fueron las tres razones por las que se tomo la medida enmarcada en la Ley de Reordenamiento del Mercado Interno. También informó el ministro que los precios y los volumenes de las estaciones SAFEC (servicio de abastecimiento fronterizo y especial de combustible) serán revisados por el Menpet. Finalizó indicando que la estrategia busca "poner orden" y atacar el contrabando de combustible.

Además de las reacciones de los usuarios en contra de las medidas adoptadas, se tiene otros efectos que han podido ser notados por la población en general, y que han sido recogidos para complementar esta investigación, es decir, ha aumentado la corrupción, ya que al aumentar las medidas de control, se han involucrado más funcionarios además de la Guardia Nacional, ahora también interviene transito terrestre y las policías locales, lo que ha incrementado la matraca a los contrabandistas de combustible. La Guardia Nacional ahora emplea algún tipo de dispositivo electrónico para registrar al conductor del vehículo, una vez que ha entrado a la estación de servicio, le despachan hasta tres (3) bolívares de combustible, y si intenta ir de nuevo a la misma estación de servicio ese mismo día, es detectado por el registro que se tiene en el dispositivo y le es retenido el vehículo, por lo que es suficiente con ir a otra bomba de otra localidad cercana para evadir este nuevo control. A la salida de las bombas es posible encontrar alcabalas de transito pidiendo todo tipo de documentación (cédula, licencia, certificado médico, titulo de propiedad, etc.), en fin, buscando cualquier excusa para imponer una multa, por su parte las policías locales también montan sus alcabalas y aplican sus controles.

Con todas estas nuevas medidas, se ha logrado minimizar las colas en las estaciones de servicio, de manera proporcional a la capacidad de comprar funcionarios que tienen los contrabandistas.

Por si fueran pocas las medidas de control que han sido impuestas, se puede cualquiera encontrar en cualquier momento y en cualquier circunstancia con una comisión de la Guardia Nacional que con el uso de otro dispositivo y una manguera, extraen en promedio media pimpina (22 litros) del tanque de cada vehículo, se supone que para que no sea vendida en Colombia, la pregunta es: ¿que hacen con toda esa gasolina extraída de los tanques de los vehículos de los usuarios que la pagaron legalmente?.

Estos elementos de control y corrupción no podrán ser eliminados mientras no sea implementado un verdadero sistema de control en el suministro de combustible, el cual pasa por el control de las dos variables fundamentales que tiene este complejo sistema: 1. precio del combustible, 2. controles humanos. Para esto se esta trabajando en un proyecto que ofrece una solución...